Raid en As Pontes

Desde hace tiempo estaba con ganas de participar en algún raid en el que combinar mi gusto por la bicicleta con mi pasión por el senderismo, así que no dude cuando unos amigos me invitaron a participar en el III Raid Desafío Bugarent en la localidad Coruñesa de As Pontes.

Lo primero que me sorprendió fue el ambiente, no estoy acostumbrado a las competiciones, es muy diferente al ambiente de las rutas cicloturistas. La gente se distribibuia en grupos encargados de organizar el material, los avituallamientos, el vestuario, estudiando los mapas dados por la organización. Hasta llevaban fosforitos y reglas para marcar en los mapas la ruta a seguir, además de portar con brújula, altímetro y porta mapas específicos para bicicleta.Una amplia gama de furgonetas, monovolumenes y autocaravanas, muchas con el logotipo del equipo, Salomon, Aventus, Buff-Coolmax, Teva, Forum sport. Todas ellas preparadas específicamente para atender a sus participantes. Una maravilla. Cada corredor tenia su caja de material, un montón de comida para los avituallamientos y algunos recibían hasta masajes...

La prueba fue muy dura, pero muy entretenida. Comencé junto a Maria José la prueba de puntuación que consistía en recorrer As Pontes para rellenar un cuestionario, cada pregunta bonificaba con 10 minutos. Lo hicimos bastante bien, la orientación urbana es muy sencilla y la distancia que estuvimos corriendo no superaría los 4 Km, además se nos hizo muy entretenido.

Después de superar la prueba Manu y yo cogimos las bicicletas, al poco de salir nos encontramos a Arsenio y Chelis que todavía no habían acabado la anterior prueba. Menudas carcajadas, nuestro equipo ya iba por delante de nuestros compañeros del equipo elite.

La prueba en bici no fue muy complicada, además íbamos siguiendo al resto de participantes por lo que no tuvimos muchos problemas de orientación. Sin embargo en la ultima parte la gente ya estaba mas dispersa y en un fallo de concentración nos pasamos una baliza. Además los últimos kilómetros si que fueron duros, cargando con la bici al hombro en una de las muchas cuestas que tuvimos que subir hacia un parque eólico.

Acabamos la bici y afortunadamente en la siguiente prueba me toco descansar y disfrutar de la compañía de Isa, la mujer de Manu, a la que le toco el ingrato papel de ser nuestra asistencia. Manu y Maria José tuvieron que pelearse con las aguas bravas. Un río con mucha agua y muchos rápidos. Daba hasta miedo. Y el rapel nada de chorradas de 3 metros, un señor rapel de 50 metros.Las pruebas fueron todas de mucho nivel.

Acabado el cañón volvimos Manu y yo a coger el testigo y montarnos en la bicicleta para completar otros 54 Km Esta etapa fue mucho mas dura y difícil que la de por la mañana, además la gente estaba mucho mas desperdigada y nos costaba mas acertar con el camino correcto. Alcanzamos a otros participantes y prácticamente fuimos a la par con ellos, en las cuestas les adelantábamos pero en los cruces teníamos que parar para ver que camino seguían. Es que somos unos novatos en orientación y eso se notó mucho. Nos pasamos una baliza y no quisimos dar la vuelta porque estábamos bastante cansados. Solo pensábamos en la cena. Miedo me daba pensar que si compitiésemos en elite todavía nos quedaría pasar la noche haciendo trekking, kayak, tirolina y mas bicicleta. Eso queda y quedará fuera de mis posibilidades.

Después de ducharnos vimos la llegada de Arsenio, Chelis y Rober. Desafortunadamente tuvieron que abandonar, Chelis estaba fastidiadísimo de la rodilla (la semana anterior se la había destrozado y aun así había venido a competir al raid!!!). Les había pasado de todo, se perdieron varias veces, Arsenio se cayo en el cruce de un río y casi pierde la bicicleta,...

El día siguiente fue un descontrol, nos levantamos tardísimo (y eso que eran las 5:40 de la mañana) y nos confundimos de punto de salida de la prueba de kayak. Cuando llegamos teníamos ya una hora de retraso, Manu y yo cogimos el kayak e hicimos lo que pudimos, poca técnica pero muchas ganas.

El trekking que venia a continuación lo hice junto a Maria José. Como habíamos salido muy tarde tuvimos que atajar unas cuantas balizas para no llegar fuera de control. Hicimos la ruta caminando a buen ritmo, sin problemas de orientación (es mucho mas fácil que encima de la bicicleta). Pasamos por un sendero al lado de un río con un paisaje espectacular, y como no, tuvimos que volver a mojarnos para vadear un río. El ultimo tramo lo hicimos corriendo por carretera, parando de cuando en cuando para respirar un poco ya que Maria José me llevaba con la lengua fuera. Llegamos con 15 minutos de margen y pudimos finalizar el Raid. Todo un éxito para mi primera participación.
Después de tanto sandwich queríamos darnos un homenaje y disfrutamos de una comida con pulpo y parrillada de carne, todo amenizado por Arsenio que había recuperado el animo y estaba como en sus mejores ocasiones. Contando historias de forma llana y con un salero que hace que te pongas a reír sin parar, todos dándole caña y él aguantando las puyas como el mejor.